El rugido de los motores aún no se escucha en los circuitos, pero el vértigo de la Fórmula 1 ya se siente en cada escudería. Mientras el megaevento de Londres sirvió de vidriera para los nuevos diseños, en Alpine todavía guardan detalles sobre el monoplaza que debutará en 2025. No hay urgencias. Tampoco ansiedad. La vista está puesta más allá.

La fecha marcada en rojo en el calendario de Pierre Gasly no es el 24 de febrero, día en que el A525 saldrá a pista por primera vez en Baréin, sino el 2026, cuando el reglamento de la categoría cambiará por completo. “Si fuera por mí, destinaría todo el límite presupuestario a 2026”, lanzó sin titubeos el francés en la gala del 75° aniversario de la F1. Sabe que ese año todos arrancarán desde cero y que una jugada estratégica puede marcar la diferencia.

El A525 será presentado en las pruebas de pretemporada del 26 al 28 de febrero en Sakhir. Desde la escudería francesa aseguran que es una evolución del modelo anterior. “No es una revolución, el corazón del coche ha permanecido igual”, explicó Gasly, con la cautela propia de quien no quiere generar falsas expectativas. Sin embargo, el jefe técnico David Sánchez se mostró más optimista: “Hemos perfeccionado algunos detalles y corregido puntos débiles. Ahora el desafío es maximizar la evolución del coche”.

La mirada a largo plazo no es exclusiva de Alpine. Con la nueva normativa, los autos serán más livianos y compactos, pero la verdadera revolución está en la aerodinámica activa. Por primera vez, los pilotos podrán modificar simultáneamente el alerón delantero y trasero, alternando entre dos modos: uno de alta carga aerodinámica y otro de menor resistencia. Se despide el DRS, y con ello, cambia el concepto de los adelantamientos en pista.

Entre las incógnitas que envuelven al equipo, una se relaciona con la futura dupla de pilotos. Mientras Jack Doohan siente la presión de Franco Colapinto, los rumores sobre un posible reemplazo crecen en la sede de Enstone. En un paddock donde nada es casualidad, la sombra del argentino se proyecta cada vez más sobre el garaje de Alpine.

La temporada está por comenzar, pero en la escudería francesa el tiempo ya corre a otro ritmo.