El aclamado futbolista rosarino ha llegado a Miami, listo para enfrentar una agenda exigente que pondrá a prueba tanto su habilidad en el campo como su resistencia física.
El jugador llegó desde La Paz, donde estuvo presente para apoyar a la Selección, aunque decidió no jugar. Esta decisión se tomó para preservar su condición física de cara a sus próximos compromisos con el Inter Miami.
Se espera que el rosarino participe en una seguidilla extenuante de 7 partidos en 22 días. Este desafío no solo es crucial para la clasificación a los Playoffs de la Major League Soccer (MLS), sino también para la lucha por el segundo título en la historia del club.