Activistas ecologistas recogieron en Portugal unas 650.000 colillas de cigarrillo y las amontonaron este domingo en una plaza del centro de Lisboa para sensibilizar contra este tipo de contaminación.

“Hemos pedido a todo el mundo en Portugal que participe en este proyecto comunitario para llamar la atención sobre la contaminación por plástico, pues hay plástico escondido en las colillas de cigarrillo y mucha gente no lo sabe“, explicó a la agencia de noticias AFP Andreas Noe, un alemán de 34 años que organizó esta iniciativa.

“Una única colilla representa un buen ejemplo de cómo la gente puede empezar a actuar, no solo sobre el tema de las colillas y los desechos, sino también sobre problemas relacionados con el océano y, a fin de cuentas, con la crisis climática”, agregó.


 

Oenegés y particulares reunieron en una semana bastantes colillas como para llenar unos cuarenta barriles de cerveza de plástico, para reciclarlos más adelante.

Luego volcaron su contenido en una lona, formando un montón al que se subió Andreas Noe equipado de una mascarilla.

El activista se instaló en Portugal hace seis años. Hace dos, reunió casi un millón de colillas en dos meses.

“Queremos poner fin a este problema alentando a la gente a tirar sus colillas a la papelera o en ceniceros de bolsillo, en cualquier lugar salvo al suelo”, declaró David Figueira, uno de los participantes de la iniciativa.