El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, propuso a los mandatarios de la región “revivir” el proceso de la construcción de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) y trabajar para crear unidades monetarias para comercializar sin depender del dólar.
Así se expresó en el discurso de apertura de la cumbre sudamericana que se realiza en la ciudad de Brasilia: “Debemos profundizar nuestra identidad sudamericana también en el ámbito monetario a través de mecanismos de compensación más eficientes y la creación de una unidad de referencia común para el comercio, reduciendo la dependencia de monedas extrarregionales“.
Y agregó: “Ningún país por sí tendrá la fortaleza de enfrentar los retos de la geopolítica y la economía mundial actual”.
Luego de haber reanudado el lunes la relación diplomática con la visita oficial del presidente venezolano, Nicolás Maduro, Lula se colocó como mayor economía de la región al frente del proceso de reconstrucción de la Unasur.
“Ante tantos cambios y desafíos en el mundo, ¿qué papel queremos para América del Sur? Ningún país puede hacer frente solo a las amenazas sistémicas actuales. Solo actuando juntos podremos superarlos y nuestra región cuenta con activos sólidos para enfrentar este mundo en transición”, aseguró el mandatario.
“No tenemos tiempo que perder. América del Sur tiene ante sí, una vez más, la oportunidad de transitar el camino de la unidad. Y no tiene que empezar de cero. Unasur es un bien colectivo. Recordemos que está vigente. Siete países siguen siendo miembros de pleno derecho. Es importante retomar su proceso de construcción”, aseguró. Chile, Uruguay y Ecuador son las naciones de la región que no volvieron al bloque sudamericano.
El mandatario aclaró antes del discurso que la reunión no pretendía sacar conclusiones ni declaraciones sino una “reflexión” sobre América Latina y en particular Sudamérica, un gran mercado consumidor de 450 millones de habitantes.
“Tenemos el mayor y más variado potencial energético del mundo si tenemos en cuenta las reservas de petróleo y gas, la hidroelectricidad, los biocombustibles, la energía nuclear, eólica y solar y el hidrógeno verde. Somos grandes y diversos proveedores de alimentos. Tenemos más de 1/3 de las reservas de agua dulce del mundo y una biodiversidad muy rica y poco conocida”, aseguró.
En ese marco, sostuvo que la integración se detuvo en parte por el gobierno de Jair Bolsonaro, al que tildó de “negacionista”, y en parte por haber aplicado la cuestión ideológica por sobre la política externa del Palacio de Itamaraty, destruyendo lazos y arruinando la cooperación con los vecinos.
La cumbre contó con la presencia del presidente Alberto Fernández, quien fue el primer orador en la sesión plenaria.
Además de Fernández y Lula, participan los presidentes Luis Arce (Bolivia), Gabriel Boric (Chile), Gustavo Petro (Colombia), Guillermo Lasso (Ecuador), Irfaan Ali (Guyana), Mario Abdo Benítez (Paraguay), Chan Santokhi (Surinam), Luis Lacalle Pou (Uruguay) y Nicolás Maduro (Venezuela).