Un hombre de nacionalidad paraguaya murió este viernes en Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde ingresó a comienzos de semana con una herida de bala en cabeza que sufrió en un hecho de inseguridad en Ciudad del Este.

Según averiguó la policía de Santa Fe a partir de testimonios, familiares lo habían trasladado en estado desesperante en un vehículo particular luego de estar internado en un hospital de Asunción, donde –según manifestaron– no había recibido la atención adecuada.

La víctima fue identificada como Ricardo Silva Galeano, de 41 años. Al parecer, tenía familiares en Rosario que pretenden velarlo en esta ciudad. Según pudo averiguar Rosario3 con fuentes federales, el hombre ingresó al país en una ambulancia de alta complejidad que pasó por el Puente Internacional San Ignacio de Loyola, ubicado sobre el río Pilcomayo, cercano a Clorinda, provincia de Formosa, y distante 42 kilómetros de Asunción.

Conocido el fallecimiento en el Heca, la fiscal de Homicidios Marisol Fabbro instó a los uniformados de la comisaría 13ª a comunicarse con sus pares paraguayos, ya que el homicidio tuvo lugar en otra jurisdicción.

La crónica del diario paraguayo La Jornada señala que Silva Galeano se dedicaba a la compraventa de baterías usadas y recibió un disparo en la cabeza en la madrugada del sábado 17 de junio. El autor del disparo, que quedó alojado en la cabeza de la víctima, sería un “microtraficante”.

“En la noche del viernes, Galeano Silva llegó hasta un local de baterías y luego de hacer algunas ventas permaneció en el lugar para compartir tragos con algunas personas. El grupo se encontraba en la acera de una vivienda cuando en la madrugada del sábado la dueña de casa escuchó ruidos de disparos y se levantó a verificar. Al salir a la calle encontró a Galeano Silva tendido en el suelo. Los demás desaparecieron del lugar”, publicó el matutino esteño.

Posteriormente, Galeano Silva quedó internado en el Pabellón de Emergencias Médicas con una herida a la altura de la oreja izquierda; luego, fue derivado a Asunción y, por último, en una odisea desesperante, al Heca, donde falleció.

Por el caso, el fiscal Luis Trinidad demoró a dos hombres que se encontraban con la víctima al momento del disparo. En su defensa, estos dijeron que mientras compartían tragos, un desconocido llegó al lugar en una moto y le vendió drogas a Galeano Silva. El presunto microtraficante se retiró y regresó a pie con intención de asaltar al vendedor de baterías y lo baleó.