En la capital de Tucumán, la comunidad de artesanos que trabaja en el Paseo de la Independencia enfrenta un posible desalojo tras la reciente noticia de un plan de reorganización urbana. Según denuncias de los artesanos, el municipio ha comenzado a implementar operativos para evitar que continúen ocupando sus puestos en la zona, y han sido amenazados con la confiscación de su mercadería.
El conflicto surgió cuando los artesanos, que han estado vendiendo en la zona durante años, fueron informados sobre la intención del municipio de reubicarlos en la Plaza de los Congresales, cercana a la Casa Histórica. La mayoría de los artesanos rechaza la medida, argumentando que el cambio les perjudicaría económicamente al reducir su visibilidad y acceso a los turistas.
Uno de los artesanos, que ha trabajado en la zona desde su infancia, expresó su preocupación: “No nos dejan trabajar. Yo he trabajado desde los 7 años, y toda esta zona la he trabajado yo. Ellos están dispuestos a ayudarnos, pero lo quieren mandar a la Plaza de los Congresales, y ayer probé y no vendí nada”.
En respuesta, la subsecretaria de Relaciones Institucionales, Carolina Oliver, explicó que el objetivo de la reubicación es crear un espacio unificado que promueva la zona como un atractivo turístico y regularice la situación de los artesanos. Según Oliver, la Plaza de los Congresales, que ha sido recientemente puesta en valor, ofrece un patio y espacio adecuados para concentrar a los trabajadores y mejorar el entorno comercial.
El municipio ha anunciado que la próxima semana convocará una mesa de diálogo para discutir el proyecto con todos los actores involucrados y abordar las preocupaciones de los artesanos. El objetivo es encontrar una solución que permita a los artesanos trabajar en un entorno más organizado, sin perder su fuente de ingresos. La situación sigue siendo tensa mientras los artesanos esperan la resolución del conflicto y la implementación de las propuestas del municipio.