Este 24 de septiembre, los tucumanos celebran con gran devoción a su patrona, la Virgen de la Merced. Desde las primeras horas del día, la Basílica de Nuestra Señora de la Merced ha sido el epicentro de diversas misas y actividades religiosas que conmemoran a la protectora de los gauchos y a la patrona de Tucumán.
La jornada comenzó a las 6 de la mañana con la primera misa del día, seguida por la segunda a las 7. Además, se han programado misas a las 8 y 9 de la mañana, culminando con una misa especial a las 11, dedicada a las Fuerzas Armadas y de Seguridad. En la noche del 23 de septiembre, se llevó a cabo un emotivo homenaje frente a la Basílica, donde los gauchos reafirmaron su devoción por la Virgen. La ceremonia incluyó la interpretación del himno nacional argentino por la banda de música de la Policía de Tucumán, y un desfile multitudinario de gauchos que llegaron de distintos puntos de la provincia.
El arzobispo Carlos Sánchez, junto al obispo auxiliar Ernesto Ferrari, estuvieron presentes en los actos, ofreciendo bendiciones y oraciones por la patria y la provincia. En su mensaje, el arzobispo hizo un llamado a la solidaridad y unidad, resaltando la importancia de honrar a la Virgen de la Merced en estos tiempos difíciles para la sociedad.
A lo largo del día, continuarán las actividades, incluyendo el acto cívico, militar y religioso en la Plaza Belgrano a las 17:00, la solemne procesión por las calles a las 17:30, y la misa central en Plaza Independencia a las 19:00. La jornada cerrará con la misa del peregrino a las 22:00 en la Basílica, acompañada de una fiesta con música folclórica en la plaza, para celebrar a la Virgen bajo el lema “Con María de la Merced, en enero y en febrero”.
Los Misachicos y Peregrinos: Devoción y Tradición en Honor a la Virgen de la Merced
Este 24 de septiembre, la ciudad de Tucumán se llena de fervor religioso con la llegada de los misachicos, pequeños grupos de peregrinos que, año tras año, caminan desde distintos puntos de la provincia para rendir homenaje a la Virgen de la Merced. Desde Panapala, entre otras localidades, partieron en procesión para cumplir sus promesas y pedir por sus familias, trabajo y bienestar.
Ariel Romano, uno de los peregrinos que lleva 32 años realizando esta caminata, destacó la importancia de la devoción que los mueve. “Caminamos por la fe, por nuestra madre la Virgen”, dijo emocionado, acompañado por otros promesantes que, como él, hacen esta travesía desde tempranas horas del día 23 para regresar a sus pueblos luego de celebrar el Día de la Virgen en la ciudad.
Los Peregrinos de Carbón pozo, Alderetes y Banda del Río Salí: Fe y Lucha en Honor a la Virgen de la Merced
En el marco de las festividades por la Virgen de la Merced, los peregrinos de distintas localidades de Tucumán continúan su camino de regreso a sus hogares, luego de haber participado en las ceremonias y misas en la Basílica. Entre ellos, un grupo proveniente de Carbón Pozo destacó por su fe inquebrantable. Uno de los peregrinos, un excombatiente, relató su experiencia y la razón que lo ha motivado a realizar esta caminata por 38 años: “Prometí a la Virgen que si salía con vida de Malvinas, caminaría cada año en su honor, y gracias a Dios, sigo cumpliendo esa promesa”.
Con más de 20 kilómetros por delante, este grupo de devotos avanza a paso firme, deteniéndose para descansar, pero siempre con el mismo impulso: la fe. A pesar de los desafíos, continúan con la tradición familiar, transmitiendo sus creencias de generación en generación.
Por otro lado, desde Alderetes, otro misachico marcha con un propósito profundo y social: pedir por el fin de las drogas. Liderado por la madre de un joven en recuperación, este grupo camina con el estandarte de la Virgen de la Merced, solicitando su intercesión para que más jóvenes puedan alejarse de las adicciones.
En medio de las festividades en honor a la Virgen de la Merced, Elsa Juarez, una madre referente de los “pañuelos negros”, se mostró visiblemente emocionada al compartir su lucha y devoción. Con lágrimas en los ojos, expresó su pedido a la Virgen y a Dios: “Le pido que no se olvide de cubrir a los hijos del alicio, que el gobierno no los deje salir y que aquellos que asesinan a nuestros hijos paguen por sus crímenes”.
La mujer, símbolo de la lucha contra las adicciones en su comunidad, señaló que seguirá luchando por los jóvenes atrapados en las drogas. “Nuestros hijos merecen volver, merecen estar con sus familias. Yo no voy a dejar de luchar hasta el último día por ellos”, afirmó con convicción.
En relación a la reciente decisión del gobierno de Tucumán de suspender las fiestas electrónicas debido al tráfico de drogas en estos eventos, la madre expresó su apoyo a la medida: “Lo celebré, algo menos para Tucumán. Pero también pido que se acabe la corrupción dentro de la policía y que los operativos se hagan de manera justa. Ellos matan a nuestros hijos, y deben pagar por ello”.
El misachico de Banda del Río Salí, junto con otros grupos, se unirá más tarde en la Basílica, trayendo consigo no solo promesas personales, sino también pedidos colectivos por el bienestar de sus comunidades. Este tipo de peregrinaciones no solo refleja la fe de los tucumanos, sino también sus luchas y esperanzas, convirtiendo la festividad de la Virgen de la Merced en un espacio donde lo espiritual y lo social se entrelazan.
La jornada continuará con las actividades programadas en honor a la Virgen, culminando en una procesión y la misa central en Plaza Independencia, donde la devoción y las plegarias de miles de tucumanos serán ofrecidas a su patrona.