El hecho ocurrió el jueves 31 de agosto cuando Gendarmería Nacional realizaba controles sobre la ruta nacional 9 e inspeccionaban un transporte público de pasajeros procedente de San Salvador de Jujuy con destino final la provincia de Neuquén.
En el interior del vehículo detectaron nueve paquetes de cocaína, de los cuales siete eran transportados dentro de un secarropa y el resto en una estufa eléctrica. El peso total de la droga fue de 9.389 kilos, por lo que se procedió a secuestrar los estupefacientes, detener a dos sujetos de nacionalidad boliviana y a una mujer argentina.