Vecinos de la calle Ayacucho y Alsina siguen lidiando con una problemática recurrente: una pérdida cloacal que persiste a pesar de recientes trabajos de reparación. Según testimonios recogidos en el lugar, los operarios realizaron una intervención hace aproximadamente una semana, pero el problema reapareció a los pocos días.
“Vinieron, arreglaron, colocaron el pavimento nuevo y limpiaron todo, pero a los tres días la pérdida volvió. Ahora el olor es insoportable y la materia fecal sale de nuevo”, expresó uno de los vecinos afectados.
La situación genera malestar en los residentes, quienes describen la zona como “imposible de habitar” debido al constante olor fétido que emana de las cloacas. Algunos vecinos aseguran que, en días de lluvia, el agua servida se mezcla con el agua de la calle, agravando las condiciones sanitarias.
El reclamo no es nuevo, ya que esta calle, históricamente, ha enfrentado problemas de infraestructura relacionados tanto con las inundaciones como con el mal estado de las cloacas. “Toda la vida fue igual en esta zona, pero lo de la cloaca es algo que sí se puede reparar y no se está haciendo de manera efectiva”, indicó otro residente.
Además, se reporta que el servicio de recolección de residuos y el trabajo de los barrenderos también se ven afectados, ya que las condiciones del pavimento impiden la correcta realización de sus tareas.