La Fundación CONIN, ubicada en la calle Caseros 1050, se encuentra en la búsqueda de padrinos que puedan brindar su apoyo económico y voluntario para garantizar la asistencia y educación de más de 80 niños que se benefician de sus programas.
La psicopedagoga Susana Méndez, quien forma parte del equipo de la fundación, compartió detalles sobre la labor que llevan a cabo y las necesidades actuales para mantener y ampliar este importante programa. CONIN se dedica a la prevención de la desnutrición infantil y trabaja con madres embarazadas, niños de hasta 5 años y sus familias, brindando un enfoque integral para abordar esta problemática.
Según Méndez, en las instalaciones de la fundación se reciben 85 niños tres veces por semana, aunque cada grupo asiste una vez semanalmente debido a que provienen de diferentes zonas de Tucumán. Se trata de un trabajo sistemático en el cual se realiza un seguimiento exhaustivo de las necesidades de cada niño y su familia.
La Fundación CONIN cuenta con un equipo multidisciplinario compuesto por pediatras, psicopedagogos, nutricionistas, trabajadores sociales y maestras jardineras, quienes colaboran activamente en el cuidado y desarrollo integral de los pequeños. Asimismo, también brindan apoyo a padres y madres jóvenes, quienes asisten a CONIN una vez por semana junto a sus hijos. Durante estas visitas, reciben contención por parte de psicólogos y se les brinda seguimiento y orientación en la estimulación adecuada para garantizar el cuidado óptimo de sus hijos.
Sin embargo, la fundación enfrenta el desafío de conseguir padrinos que puedan contribuir con donaciones económicas y brindar ayuda voluntaria para continuar con su valiosa labor. Cada niño que forma parte del programa tiene un costo estimado de $25.000 para CONIN, por lo que cualquier aporte económico, sin importar su cuantía, es valioso y marcará una diferencia significativa en la vida de estos niños.
Con el apoyo solidario de la comunidad y la generosidad de los padrinos, la Fundación CONIN podrá seguir brindando asistencia y educación a estos niños vulnerables, brindándoles la oportunidad de un futuro mejor y rompiendo el ciclo de la desnutrición infantil.