En el marco de un paro de 48 horas convocado por las universidades nacionales, la Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad Nacional de Tucumán (ADIUNT) reportó un alto acatamiento en la primera jornada de protesta. Las actividades, que se llevaron a cabo en el rectorado de la UNT, incluyeron clases públicas, una olla popular y una asamblea interclaustros.
Ariel Osatinsky, Secretario de Finanzas de ADIUNT, expresó que la jornada reflejó el profundo malestar de los docentes frente a la situación salarial. “Nuestro salario debería rondar los 570.000 pesos, pero apenas alcanzamos los 270.000 pesos, lo que nos deja muy por debajo de la línea de pobreza”, explicó Osatinsky. En el caso de los docentes con dedicación simple, el salario se encuentra entre 110.000 y 120.000 pesos, muy por debajo de la canasta básica alimentaria, que ya supera los 400.000 pesos.
Osatinsky también criticó duramente la oferta del gobierno, que consiste en un aumento del 3% para agosto y solo un 2% para septiembre. “Esto es una miseria absoluta y un brutal ajuste”, afirmó. Además, denunció la falta de presupuesto en las universidades, lo que afecta gravemente el desarrollo de actividades académicas como prácticas en laboratorios y giras de estudio.
La protesta continúa hoy con nuevas actividades y la expectativa de que el gobierno escuche las demandas de los docentes, quienes exigen una recomposición salarial acorde con la inflación y un presupuesto adecuado para las universidades.