La muerte de un bebé de tan solo 10 meses ha conmocionado a toda una comunidad luego de que la investigación apuntara hacia la responsabilidad de la niñera que se encontraba a cargo del cuidado del pequeño en el momento del trágico suceso.
Los hechos tuvieron lugar el pasado 9 de junio en la provincia cuando los padres del niño decidieron dejarlo al cuidado de Graciela Margarita Parientes, de 41 años, la niñera responsable de atender al menor. Entre las 9:30 y las 10 de la mañana, la niñera decidió bañar al pequeño y, por un momento, lo dejó solo en la bañera con agua. Al regresar, se encontró con una situación desgarradora: el bebé estaba sumergido en el agua y necesitó atención médica inmediata para intentar salvar su vida.
A pesar de la intervención inmediata de los especialistas, el bebé se encontraba en un estado grave y con lesiones irreversibles en el cerebro, por lo que fue trasladado al Hospital de Niños para recibir atención especializada. Este triste suceso llevó a las autoridades a investigar el caso a fondo, y como resultado se acusó de abandono de persona agravado a la niñera.
En una reciente audiencia, la Unidad Fiscal de Homicidios II del Ministerio Público formuló nuevos cargos contra la imputada y solicitó una prórroga de la prisión preventiva por otros dos meses. El juez de audiencia, ante las evidencias presentadas, accedió a la petición de la Fiscalía y la niñera deberá enfrentar un proceso judicial con cargos actualizados.