Sobre la intersección de Corrientes y Alberti, el rugir de las máquinas perforadoras marca un hito en la vida de los vecinos de Don Bosco. Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) ha iniciado la excavación de un nuevo pozo, una obra que promete aliviar un problema histórico: la falta de agua potable en la zona.
“Es una decisión del gobernador Osvaldo Jaldo dar agua potable a todos los tucumanos”, subraya Marcelo Caponio, presidente de la SAT. Con tono firme, destaca que esta perforación, que ya alcanzó los 150 de los 300 metros proyectados, traerá una solución definitiva para más de 6.000 usuarios. No solo Don Bosco se beneficiará; la nueva fuente también reforzará las redes de Villa Luján.
Las obras hídricas se han convertido en una prioridad para la empresa. “Venimos haciendo lo mismo en los barrios Juan B. Terán, El Bosque, entre otros”, enumera Caponio, consciente de la magnitud del desafío. Y la lista sigue creciendo. Según confirma el gerente general de la SAT, en barrio Ciudadela ya se realizan pruebas de presión tras equipar otro pozo, mientras que en Villa Urquiza se conecta a la red el nuevo caudal perforado en el hospital Avellaneda.
La perforación de un pozo es más que un acto técnico: es una apuesta al futuro, un compromiso con quienes esperan abrir la canilla y encontrar, por fin, agua potable. Para Don Bosco, esta vez, la promesa parece volverse realidad.