El hecho ocurrió el jueves en Las Talitas, donde tres recolectores de residuos que estaban realizando su trabajo, salvaron la vida de una bebé de siete meses que había dejado de respirar.

La madre de la nena habló con el móvil de El Ocho y contó que su hija comenzó a sentirse mal luego de que le aplicaran una vacuna, la cual le generó fiebre y convulsiones. La mujer no dudó un segundo y salió a la vereda de su casa para pedir ayuda a los vecinos.

En ese momento se encontraban en la zona tres empleados recolectores de residuos de la municipalidad de Las Talitas, quienes se acercaron hasta la mujer para averiguar qué sucedía. Observaron que la niña no respiraba y actuaron de manera inmediata realizando trabajos de RCP y primeros auxilios.

Afortunadamente la bebé comenzó a respirar nuevamente gracias al trabajo de estas tres personas que la asistieron. La madre de la nena pide a las autoridades municipales un reconocimiento y una mención especial para los empleados que salvaron a su hija.