El precio de la carne viene aumentando casi de forma mensual en un porcentaje del 3%, el cual es muy por debajo del 7, 8% que está marcando la inflación. Esto se debe a las escasas lluvias que se produjeron durante la temporada, explicó Daniel Urcía, vicepresidente de la Federación de la Industria Frigorífica en la Argentina.
A partir de esta sequía se aceleró la venta de ganado para faena, generando así una mayor oferta dentro del mercado. Esto, junto con el bajo nivel adquisitivo que posee la población, permiten que los precios de la carne aumenten pero que no escalen al ritmo de la inflación.
“En primer lugar, esto demuestra lo que siempre intentamos explicar: la construcción del precio de la carne es por oferta y demanda absolutamente transparente, independiente de las intervenciones que se quieran hacer sobre el mercado”, indicó Urcía.
A partir del incremento de oferta que existe actualmente en el mercado y que según los datos de de existencia, esta va a ser “suficiente” hasta la primavera.