Este lunes se reanudó el juicio contra el ex-rector de la Universidad Nacional de Tucumán, Juan Alberto Cerisola, junto con el ex-secretario administrativo Luis Saca, la ex-directora de construcciones universitarias Olga Cudmani y el ex-director de inversiones y contrataciones Osvaldo Venturino. El proceso judicial investiga presuntas irregularidades en la administración de fondos destinados a obras en la institución.
En el inicio de la audiencia, se informó que la UNT reemplazó a su abogado querellante, apartando a Rodolfo Burgos y designando a Patricio Mares Perín en su lugar. Posteriormente, la defensa presentó a tres testigos, cuyas declaraciones fueron consideradas clave para demostrar la gestión administrativa durante el mandato de Cerisola. Entre ellos, destacó el testimonio del decano de Educación Física, Mario Abaca, quien describió el estado crítico en que se encontraba la universidad y los esfuerzos realizados para superar esa situación.
Tras escuchar los testimonios, el tribunal dispuso un cuarto intermedio hasta el 23 de diciembre, cuando se realizarán inspecciones oculares en las obras cuestionadas. Si bien aún no se definió el itinerario de visitas, se espera que se prioricen las construcciones señaladas en la causa. Las audiencias se reanudarán en marzo del próximo año, una vez finalizado el receso judicial.
Finalmente, el abogado defensor de Saca resaltó la importancia de estas inspecciones, señalando que serán fundamentales para demostrar que los fondos fueron utilizados correctamente y no desviados hacia otros fines. “Esperamos que el tribunal pueda verificar en el terreno lo que venimos sosteniendo desde el inicio del juicio”, expresó.