En la noche del lunes, una fuerte tormenta azotó la provincia de Tucumán, dejando a su paso daños significativos y un apagón que afectó a varias zonas.
Según los informes de los vecinos, los primeros chaparrones llegaron alrededor de las 20. Cerca de la medianoche, la tormenta se intensificó, acompañada de una abundante caída de agua, granizo y fuertes ráfagas de viento.
Estas condiciones climáticas adversas provocaron la caída de árboles y algunos tendidos eléctricos, lo que agravó la situación para los residentes de la provincia.
Alrededor de la 1 de la madrugada del martes, se produjo un apagón que dejó a oscuras a cientos de hogares. La falta de electricidad persistió hasta después de las 2.15, dejando a los residentes en la oscuridad durante más de una hora.