El conflicto en el transporte público de pasajeros de Tucumán se agudiza tras la reciente reunión entre empresarios del sector, empleados de la FATAP y dirigentes de la UTA a nivel nacional. En el encuentro, se abordaron dos temas cruciales: la distribución de fondos y la disparidad salarial entre choferes del interior del país y los de Buenos Aires.

Los empresarios del transporte, nucleados en AETAT, manifestaron su preocupación por la falta de fondos nacionales destinados al interior del país, argumentando que gran parte de los subsidios se concentran en la región del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). En contraste, las provincias, como Tucumán, reciben una proporción menor, lo que les impide afrontar aumentos salariales.

Desde UTA, se destacó la necesidad de que todas las provincias cumplan con los acuerdos salariales y abonen la misma escala salarial. Sin embargo, los empresarios advirtieron que sin compensaciones tarifarias adecuadas, no pueden cumplir con estas exigencias. En Tucumán, por ejemplo, el costo de un aumento salarial se torna inviable sin el respaldo financiero necesario.

El dirigente de AETAT, Berreta, indicó que la situación financiera actual no permite implementar un aumento salarial para los trabajadores del sector, a pesar de que estos lo merecen. Berreta mencionó que los trabajadores siguen cobrando según el último aumento acordado en febrero y que están esperando una reunión con el gobierno para buscar soluciones.

Las críticas también han surgido a nivel local. Carlos Arnero, concejal de la capital, fue señalado por Berreta por realizar afirmaciones “falsas y maliciosas” sobre el sector. Berreta acusó a Arnero de ignorar las condiciones actuales y destacó que el transporte público sigue operando gracias a las compensaciones tarifarias del gobierno provincial.

Además, se pidió una audiencia con el presidente del consejo, Fernando Jury, y los concejales Gustavo Cobos y José María Canelada, para discutir la situación del sector. Los empresarios argumentan que la municipalidad no aporta fondos suficientes y que las tarifas pagadas por el usuario no cubren los costos reales del servicio.

En medio de estas tensiones, los trabajadores del transporte se preparan para una marcha hasta la sede de AETAT, mientras las negociaciones continúan en busca de una resolución a este conflicto que afecta tanto a trabajadores como a usuarios del transporte público.