La provincia de Tucumán se encuentra en una situación crítica debido a la alta probabilidad de incendios forestales, según confirmaron las autoridades locales. Este fenómeno no es exclusivo de Tucumán, ya que otras provincias del noroeste argentino, como Catamarca y Córdoba, también están en alerta roja por la peligrosa combinación de altas temperaturas, baja humedad y vientos fuertes.
En Córdoba, los incendios ya han arrasado con más de 16.600 hectáreas, afectando gravemente zonas como el Valle de Punilla, donde las llamas alcanzaron alturas superiores a los 20 metros, destruyendo vegetación y forzando la evacuación de al menos 50 personas. Se registraron temperaturas superiores a los 40 grados, lo que intensificó la propagación del fuego, que incluso afectó rutas nacionales como la 18 y la 38.
El peligro también acecha en Tucumán, especialmente en las áreas rurales y los valles, donde las condiciones climáticas actuales aumentan el riesgo de incendios. Las autoridades han pedido a la población que extreme las precauciones y evite encender fogatas o generar chispas en zonas de campo. La situación podría agravarse debido a los pronósticos de fuertes vientos de más de 30 kilómetros por hora.
Finalmente, se advirtió que esta semana podría haber un descenso de las temperaturas y algunas precipitaciones aisladas, lo que podría aliviar la situación en algunas áreas afectadas.