César González, secretario general de UTA Tucumán, habló con la prensa e indicó que en horas de la mañana los delegados, junto con los empleados despedidos, se dirigieron a la sede con los telegramas recibidos para que el cuerpo de abogados del gremio rechace las cartas documento.
También le pidió a los trabajadores que reciban los telegramas, acercarse a la institución gremial para que estos sean rechazados y luego realizar la denuncia en la Secretaria de Estado del Trabajo.
González también confirmó que mañana se paralizará el servicio de transporte, solo resta saber si tendrá un horario especifico o será con paros sorpresivos. Además advirtió que la medida de fuerza se levantará únicamente si todos los empleados son reintegrados a sus tareas habituales.
Recordamos que durante la noche del martes durante una asamblea del gremio, Walter Medina, dirigente de la organización, alertó sobre la inminente llegada de 300 telegramas de despido para los trabajadores del sector. La medida, que afectaría a 200 empleados, más otros 100 de la Línea 11, podría desatar un paro general, dejando a la capital tucumana sin servicio de transporte.
Medina subrayó la gravedad de la situación, asegurando que la única respuesta ante los despidos será la acción directa. “No permitiremos que ningún compañero quede en la calle”, afirmó tajantemente, dejando en claro que el gremio está dispuesto a tomar medidas extremas si los despidos se concretan. La incertidumbre es palpable, con rumores de que los telegramas ya habrían sido enviados, aunque aún no han llegado a los domicilios de los trabajadores.
La situación no solo afecta a los empleados del transporte, sino también a miles de usuarios que dependen de este servicio en Tucumán. Medina expresó su preocupación por el impacto que un posible paro tendría en la comunidad, especialmente en los estudiantes y trabajadores que necesitan desplazarse diariamente. “Si los colectivos dejan de circular, va a ser un desastre”, advirtió.
Hasta ahora, los intentos del gremio por obtener una respuesta de la Intendencia han sido infructuosos, lo que ha aumentado la tensión en las últimas horas. Medina concluyó con un llamado a la reflexión, instando a las autoridades a encontrar una solución de fondo para evitar una paralización que afectaría a toda la ciudad.