¿Sabías que la tierra de nuestro Valle Calchaquí es árida y dulce a la vez? Así es. Esto hace que resguarde cerca de una veintena de viñedos y bodegas, algunas artesanales o caseras y otras más industrializadas, y de las cuales once ofrecen servicios complementarios para los turistas, como alojamiento, visitas guiadas y gastronomía.
A lo largo de los últimos años y a partir de un potente trabajo mancomunado entre el sector público y el privado, los vinos tucumanos adquirieron un mayor renombre a nivel nacional, caracterizados por ser intensos y de alta calidad, con una gran estructura de aroma y color, muy concentrados y con un buen aporte de alcohol. Esto es así porque el valle tucumano es uno de los escenarios más privilegiados para este cultivo, por su gran amplitud térmica, con un clima frío en invierno y caluroso y seco en verano y con una alta exposición al sol durante casi todo el año.
La Ruta del Vino de Tucumán también permite hacer un maridaje perfecto con numerosas actividades y productos turísticos que se arraigan a la mítica Ruta 40 y a la 307, en medio de los antiguos cardones y bajo el espíritu de la Pachamama. Entre ellos se pueden mencionar la visita a diferentes poblados como Talapazo, donde es posible vivenciar el turismo rural comunitario, atractivos como el desierto de Tiu Punco e importantes sitios arqueológicos como la Ciudad Sagrada de Quilmes y las Ruinas de Condorhuasi en El Pichao.
Además, ahora que arrancó el otoño y, de a poco, las noches se vuelven cada vez más frescas, ¿qué mejor que un vino tucumano para acompañar la exquisita gastronomía local? Las empanadas, la humita y el locro generan una combinación ideal con los intensos y perfumados tintos de nuestro Valle Calchaquí. En tanto, los torrontés, mucho más livianos y cítricos, se llevan muy bien con las picadas con quesos tafinistos, las truchas que se pescan en el dique La Angostura y los postres más dulces y ricos como la ambrosía, el vigilante, los alfajores de turrón de miel de caña y la mazamorra.
Curiosidades: ¿Sabías que en el Valle Calchaquí tucumano podés conocer la primera bodega administrada por una comunidad originaria en Latinoamérica y la tercera en el mundo? Así es, las otras se encuentran en Australia y Canadá. No dejes de visitar este emprendimiento ubicado en Amaicha y de recorrer toda la Ruta del Vino de la provincia. Ingresá al enlace y empezá a organizar tu viaje: https://shorturl.at/kOP59.