En la temporada invernal, es común que busquemos refugio en alimentos más calóricos y nos sintamos tentados a abandonar nuestros hábitos saludables. Sin embargo, es importante recordar que siempre está permitido disfrutar de diversos alimentos, pero la clave reside en la cantidad y la elección adecuada.
Los expertos en nutrición enfatizan la importancia de mantener hábitos alimentarios equilibrados durante todo el año. La nutricionista, Jessy Silva, destaca que la dieta emocional está estrechamente relacionada con nuestras emociones y no necesariamente refleja un hambre real. Por lo tanto, es crucial aprender a identificar y controlar nuestros impulsos alimentarios en función de nuestras necesidades físicas reales.
Para combatir el hambre y mantenernos saciados, se recomienda incorporar meriendas proteicas en nuestra rutina diaria. Estas meriendas, como la crema de maní, el queso, los panqueques de avena, los huevos, entre otros, no solo son deliciosas, sino que también proporcionan una sensación duradera de saciedad.
Además, es esencial consumir suficiente fibra para cubrir nuestras necesidades diarias. Las semillas son una excelente opción, ya que son ricas en fibra y ofrecen variedad en su presentación. Ya sea en forma de crema de maní, espolvoreadas sobre ensaladas o agregadas a batidos, las semillas pueden ser una adición versátil y saludable a nuestra alimentación.
Otro aspecto crucial para mantener nuestra salud en óptimas condiciones durante el invierno es la hidratación. No debemos olvidar consumir suficiente agua, incluso en ayunas, ya que es esencial para el funcionamiento adecuado de nuestro organismo.
En cuanto a las frutas, es recomendable incorporarlas de diferentes maneras en nuestra dieta. Además de consumirlas frescas, también podemos disfrutarlas salteadas o en compotas, lo que nos brinda variedad y nos ayuda a satisfacer nuestro paladar.
Por último, pero no menos importante, la actividad física es fundamental para mantener un estilo de vida saludable. Aunque las bajas temperaturas del invierno pueden desmotivarnos, es esencial encontrar la manera de realizar ejercicios adaptados a nuestras posibilidades. Ya sea practicando deportes bajo techo, haciendo ejercicios en casa o disfrutando de paseos al aire libre cuando sea posible, la actividad física contribuirá a fortalecer nuestro cuerpo y mejorar nuestra salud en general.