China presentó un tiburón robot de 5 metros con cámaras y navegador por satélite diseñado para “misiones especiales”. Este pez biónico único en su tipo puede hacer casi todo lo que un tiburón ballena real, incluso abrir y cerrar la boca y poder sumergirse a profundidades de 20 metros.
De acuerdo a lo publicado por el medio británico The Sun, las innovadoras características de alta tecnología incluyen cámaras ópticas, sensores, tecnología de sonar y un sistema de navegación incorporado. El primer tiburón ballena robótico inteligente del mundo también está equipado con un control remoto inalámbrico, natación programada y propulsión biónica de múltiples articulaciones.
Esto significa que el pez falso, que está inspirado en los gigantes marinos, puede nadar a velocidades de hasta 1,6 mph y sumergirse a profundidades de unos 20 metros. Los expertos del noreste de China que diseñaron el pez biónico esperan que pueda monitorear la calidad del agua, mapear el terreno submarino e incluso llevar a cabo misiones especiales. Aunque no está claro cuáles podrían ser las misiones especiales, se teme que China pueda utilizar al tiburón con fines militares o de vigilancia.
El Grupo Shenyang Aerospace Xinguang, con sede en el noreste de China, es responsable de la creación. Su diseñador Gao Chao dijo: “Este es el pez biónico más grande que hemos estudiado hasta ahora. El tiburón ballena tiene siete articulaciones accionadas, y cada articulación requiere computación, comunicación y detección, que también es nuestra tecnología clave”.
Fang Xuelin, subdirector de la Oficina de Investigación de Tecnología de Propulsión Subacuática, añadió: “Cuando este robot trabaja bajo el agua o realiza una tarea, inevitablemente encontrará varios obstáculos en su ruta”.
Xuelin explicó que los datos pasan por un proceso complejo antes de ser utilizados por el pez biónico. “Es necesario analizar y extraer una gran cantidad de datos de forma sincronizada, y luego corregirlos y verificarlos mutuamente antes de poder extraer rápidamente los datos verdaderamente efectivos para que nuestro tiburón ballena biónico identifique el entorno que lo rodea”.
El tiburón ballena robótico transformará las operaciones marinas y la investigación científica. A diferencia de los robots submarinos convencionales, que funcionan con hélices, el pez biónico es capaz de detener la contaminación del agua al restringir la liberación de sustancias químicas dudosas. El cuerpo elegante y aerodinámico reduce la posibilidad de quedar atrapado entre cualquier obstáculo.