La malnutrición infantil, en la actualidad, es un problema serio que afecta tanto a niños como a adolecentes. Se llama malnutrición a las complicaciones que son resultado del exceso o déficit de alimentos.
El consumo en exceso de calorías puede llevar a enfermedades como obesidad, retraso en el crecimiento, sobrepeso, problemas digestivos, fatiga y dolor en las articulaciones. Por otro lado, la falta de alimentos esenciales puede causar desnutrición, retraso en el crecimiento, baja estatura, deficiencia de micronutrientes, anemia y bajo rendimiento.
Según el último informe del Ministerio de Salud, en Argentina el 41,5% de los niños y adolescentes tienen sobrepeso u obesidad, mientras que el 1,7% tiene bajo peso. Es importante saber que nutrientes como el calcio, el hierro, las grasas, las proteínas y los hidratos de carbono son esenciales para el crecimiento adecuado de los niños y se pueden encontrar en los alimentos.
Algunas causas de la mala nutrición infantil son un estilo de vida desordenado en la familia, una exposición excesiva a las pantallas, una alimentación no saludable, la falta de actividad física, el alto consumo de ultraprocesados, y la normalización de conductas no saludables.
Según la nutricionista Solana Nacul, es recomendable que los niños tengan una alimentación más natural, hagan ejercicio físico y actividad física, duerman lo suficiente, reduzcan la exposición a las pantallas y aumenten el contacto con el sol y la naturaleza, reciban evaluaciones médicas y manejen sus emociones adecuadamente. Con estas recomendaciones, se puede mejorar la salud y nutrición de los niños.