En un esfuerzo por abordar el crecimiento urbano sin planificación en la región, la docente e investigadora del CONICET, Paula Boldrini, está liderando un ambicioso proyecto federal destinado a proyectar el Cerro San Javier como un espacio participativo y protegido. La iniciativa, que está siendo elaborada de manera colaborativa en diversas instituciones durante este año, será presentada al público el próximo año.

El Cerro San Javier, una icónica elevación en el paisaje tucumano, se ha convertido en el epicentro de un conflicto urbano debido al crecimiento desordenado de la ciudad sin una planificación definida. Para abordar este desafío, el proyecto dirigido por Boldrini apunta a establecer un criterio consensuado sobre cómo gestionar el área de contacto entre el cerro y el área metropolitana de Tucumán, conocida como el pedemonte.

“La sierra es un área que debe estar protegida”, afirmó Boldrini, enfatizando la importancia de conservar y preservar este valioso recurso natural y cultural. El proyecto plantea una serie de iniciativas que abordan tanto la protección del entorno como el aprovechamiento sostenible de sus recursos.

Dentro de las propuestas presentadas, se destacan iniciativas agrícolas impulsadas por pequeños productores locales, con el objetivo de fomentar la producción de alimentos frescos y locales que puedan abastecer a la ciudad. Además, se prevé la mejora y multiplicación de los senderos que serpentean por el cerro, permitiendo a los visitantes explorar su belleza natural de manera responsable y segura.

Asimismo, se vislumbra la transformación del Cerro San Javier en un espacio de ferias y actividades diversas, que podrían incluir eventos culturales, artesanales y recreativos. Esto no solo potenciaría la economía local, sino que también reforzaría el vínculo entre la comunidad y su entorno natural.