Una persona fue sorprendida por personal de la Dirección General de Aduanas (DGA) cuando intentaba ingresar de manera irregular al país desde Chile golosinas valuadas en $1.500.000, informaron fuentes de la dependencia.

El hecho fue detectado durante un control en el Paso Internacional Pino Hachado, en la frontera con el país trasandino.

El conductor, ciudadano argentino que viajaba en un automóvil con matrícula argentina, se presentó con intenciones de ingresar al país y, ante las preguntas habituales de los inspectores del organismo, aseguró: “Traigo algunos productos comestibles y ropa para mi hijos”, según precisaron desde la Aduana.

Durante inspección se hallaron 31 bultos de golosinas e indumentaria que contenían más de 3.000 productos que no habían sido declarados.

“Dada la cantidad y variedad de la mercadería, se presume que el hombre estaba ingresando los productos con fines comerciales, una transgresión al Régimen de Equipaje, establecido en los artículos 489 y 490 del Código Aduanero”, indicaron desde la DGA, y precisaron que “cabe señalar, también carecían de la debida certificación del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), necesaria para una importación de productos alimenticios de ese tipo”.

Los agentes de la Aduana resolvieron el secuestro de las mercancías, por la infracción tipificada en el artículo 977 del Código Aduanero.

Según lo detallado, la mercadería secuestrada incluyó 255 paquetes de gomitas, 65 paquetes de confites Nerds, 24 paquetes de caramelos Harry Potter, 24 paquetes de Nesquik sabor frutilla, 30 paquetes de Jelly Belly, 80 paquetes de pastillas Life Saver, 138 paletas de caramelo, 120 cajas de caramelos, 1.750 bolsas de snacks, 36 paquetes de gomitas Sour Patch, 24 paquetes de caramelos masticables, 83 cajas de gomitas Warheads y 260 unidades de chocolates Reese’s.