La joven norteamericana de 19 años, Madison Ringshaw, se filmó imitando la canción Ceilings de Lizzy McAlpine para un desafío de TikTok pero el resultado fue doloroso. Poco después de comenzar a grabar se cayó y se rompió la nariz. Necesitó una cirugía pero aún así terminó de grabar el video.
En las últimas semanas más de 400 mil usuarios de TikTok participaron en la tendencia que consiste en pretender cantar una versión acelerada de la exitosa canción y huir dramáticamente de la cámara. Aunque otros grabaron sus versiones en playas pintorescas y en el Paseo de la Fama de Los Ángeles, Madison eligió un estacionamiento vacío.
Después de alejarse de su amiga que filmaba, hizo un par de giros antes de quitarse los zapatos. Tras rodar por el suelo, la adolescente corrió de regreso en la dirección donde había comenzado el video, pero cayó al piso.
Grababa un video y terminó en el hospital
Aunque inmediatamente notó que le sangraba la nariz, la TikToker no permitió que esto le impidiera completar su video. El clip de 33 segundos termina con Madison imitando las palabras finales de la canción mientras aún se recupera en el suelo.
Poco después de su caída, Madison llamó a su madre para contarle sobre la lesión. “Llamé a mi mamá y le dije que pensaba que me había roto la nariz, pero ella no me creyó hasta que le envié una foto de mi nariz. Nunca antes me había roto un hueso del cuerpo ni me había caído en un TikTok, por lo que esta es definitivamente una experiencia por primera vez”, contó.
Luego de la llamada telefónica Madison decidió ir a un hospital cercano, donde los médicos confirmaron sus sospechas y terminó siendo operada para poder corregir el daño.