Un total de 60 universidades nacionales han alzado la voz en reclamo por fondos y denuncian discriminación en la distribución de recursos. Las instituciones de educación superior exigen que se les transfiera el mismo monto asignado a la Universidad de Buenos Aires (UBA), alegando “discriminación federal”.

La UBA ha sido la única beneficiaria de una actualización en su financiamiento, recibiendo más de 61 mil millones de pesos destinados a gastos de funcionamiento y niveles de atención en salud. Este desequilibrio ha generado malestar en el resto de las universidades nacionales, que sienten que sus necesidades están siendo ignoradas.

El reclamo por una distribución equitativa de los fondos fue formulado por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), órgano que representa a todas las universidades públicas del país. Las autoridades académicas insisten en que es esencial corregir esta disparidad para garantizar el funcionamiento adecuado de todas las instituciones y mantener la calidad educativa a nivel federal.