Carlos Melconian cuestionó la política económica del gobierno de Javier Milei, al sostener que aplica un plan basado en una “tortura” para llevar la inflación a la baja. Además, dijo que si bien el dólar no está atrasado, “no le sobra nada”.
“Yo tuve problemas grandes con otros Gobiernos por calcular inflación, así que quiero aclarar que no somos el Indec, lo que tenemos son aproximaciones. La inflación estaba en el rango del 4% y ahora está en el rango del 3%. Si en noviembre viene 2,9%, mejor, pero no cambia nada”, indicó el economista.
Y agregó: “En lo que no estoy de acuerdo es en torturar para bajar al uno o dos por ciento mensual, si esta caída se va a dar sobre la base de fijar el tipo de cambio o las tarifas, va a terminar siendo peor el remedio que la enfermedad. Antes de presentar un programa de estabilidad hay que acomodar precios relativos, porque sino, eso queda latente a futuro. Si lo que buscan es acomodar los números con tortura fiscal o monetaria, no salimos más”.
Al referirse al dólar, Melconian sostuvo: “Cuando uno hace un análisis para ver dónde estamos, la discusión muchas veces se circunscribe, insuficientemente, a la cuestión del tipo de cambio. Y está claro que a este tipo de cambio no le sobra mucho, aunque tampoco es el tipo de cambio real del final de la convertibilidad o de la tablita de Martínez de Hoz, contra eso todavía tiene aire, pero no le sobra nada”.
“Está finito porque este programa intentó arrancar con un colchón al que se lo terminaron comiendo, porque la inflación fue por arriba de la devaluación”, explicó el especialista.
En diálogo con Radio Mitre, Melconian destacó sin embargo la importancia de mantener el orden fiscal, otra variable que influye directamente en el aspecto cambiario.
“Después hay muchos otros acontecimientos que seguir para hacer un análisis serio. La cuestión del tipo de cambio tiene que ver directa o indirectamente con la política fiscal de un país, en Argentina no se puede tener más déficit fiscal, y esa es una gran lección aprendida a futuro”, aseveró.
Entre los otros factores a tener en cuenta, el expresidente del Banco Nación mencionó el nivel del costo salarial en dólares, el nivel de importaciones, el movimiento de capitales, y la situación de las tasas de interés y del precio de dólar en el mundo.
“También es importante la institucionalidad, la credibilidad y el comportamiento de su clase dirigente, ahí estamos menos diez”, apuntó.