Cada 3 de mayo se celebra el Día Mundial de la Libertad de Prensa y este año es el aniversario número 30 de la proclamación de esta fecha. La jornada fue designada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en respuesta a un llamamiento realizado por periodistas africanos en la capital de Namibia, conocida como la Declaración de Windhoek, que tuvo lugar entre el 29 de abril y 3 de mayo de 1991.

En ese marco, la temática de este año es: “Dando forma a un futuro de derechos: la libertad de expresión como motor de los demás derechos humanos”.

La fecha fue designada por la Asamblea General de las Naciones Unidas por este encuentro que reunió a 60 periodistas medios de comunicación africanos en un seminario organizado por la Unesco, para la elaboración de un documento que reúne los principios de la libertad de prensa.

“El establecimiento, mantenimiento y fortalecimiento de una prensa independiente, pluralista, y libre son indispensables para el desarrollo y mantenimiento de la democracia en un país, así como para el desarrollo económico”, detallaron.

En el mismo documento, expresaron la necesidad urgente de modificar la situación que asolaba al continente africano, en medio de amenazas, persecuciones y censura constantes.

“En el África actual, pese a los acontecimientos positivos que se han registrado en algunos países, periodistas y editores son víctimas de represión en muchos países -son objeto de asesinatos, arrestos, detenciones y censura-, y se restringen sus actividades por diversas presiones económicas y políticas, como las restricciones impuestas al suministro de papel periódico, los sistemas de licencia previa que limitan la libertad de publicación, las restricciones a la concesión de visas lo que obstaculiza la libertad de movimiento de los periodistas, las restricciones al intercambio de noticias y de información, y las limitaciones a la libre circulación de diarios dentro de los países y fuera de sus fronteras nacionales. En algunos países, el partido único ejerce un dominio total sobre la información”, denunciaba.

Y en el siguiente punto, recordaron que había por lo menos 17 periodistas y editores detenidos en prisiones africanas, y 48 periodistas africanos murieron en el ejercicio de sus funciones profesionales entre 1969 y 1990.

Debido a los conflictos, violencia, crisis medioambientales, desigualdades económicas que obligan a migraciones, y a la continua desinformación e información errónea que afectan a la salud de las instituciones, la democracia, el Estado de Derecho y Derechos humanos, la ONU decidió hacer en esta fecha un llamamiento para poner “en el centro la libertad de prensa, así como unos medios de comunicación independientes, pluralistas y diversos, como factor clave para disfrutar de todos los demás derechos humanos”.