El Gobierno dejará de subsidiar las tarifas de luz a comercios, industrias y pymes, limitando la asistencia estatal solamente a los sectores vulnerables, según informaron funcionarios del Ministerio de Economía y de la Secretaría de Energía en la última audiencia pública destinada a presentar los lineamientos del nuevo esquema de subsidios que comenzaría a regir en mayo.
“El nuevo esquema no contiene ningún tipo de subsidio a las actividades productivas. No sería compatible subsidiar a la energía y tener precios liberados“, argumentó Salvador Gil, funcionario de la Secretaría de Energía, sobre la decisión que afectará al menos a 100.000 empresas.
Respecto al funcionamiento de la Canasta Básica Energética (CBE), Gil anunció que “sólo se van a subsidiar necesidades humanas básicas y cuando sea necesario”. El nuevo esquema, anticipó el funcionario, subsidiará directamente a la demanda, a través de una transferencia directa al banco, o un descuento en la factura.
Por su parte, Martín Vauthier, asesor en Economía, señaló que “en un contexto de recursos escasos, se eliminan subsidios a la demanda no residencial, por ejemplo, en procesos productivos, dado que en dicho caso no es posible asegurar que los beneficiarios reales sean los sectores de menores ingresos”.