Con la aceleración de la inflación en abril, que llegó al 8,4%, la canasta básica total (CBT), que establece el umbral de la pobreza, aumentó 6,3% en el cuarto mes del año, por lo que una familia tipo, de cuatro integrantes (dos adultos y dos chicos) necesitó $203.361 para no ser considerada pobre, según informó este martes el Indec.

En tanto, la canasta básica alimentaria (CBA), que define la línea de la indigencia, marcó también un incremento del 7,3%, por lo que ese hogar requirió de $94.148 para cubrir las necesidades básicas para subsistir.

De acuerdo al último informe del organismo estadístico correspondiente a abril de 2023, la variación de las canastas en su medición interanual, se ubicó por encima del índice de inflación, que subió 108,8%.

En concreto, la línea que mide la indigencia subió 7,3% en abril y tuvo una aceleración de 121,4% interanual, mientras que la evolución de la canasta que fija el umbral de la pobreza fue de 6,3% en el tercer mes del año y acumuló una suba de 113,5% interanual.

De esta manera, acumulan en el primer trimestre del año incrementos del 40,1% y 33,3%, respectivamente.