Un nuevo episodio de violencia e inseguridad tiene como víctima a la familia de Antonela Roccuzzo, esposa del capitán de la selección argentina Lionel Messi. En la mañana de este miércoles, delincuentes que se desplazaban en un auto blanco con vidrios polarizados se pusieron a la par de un Onix negro en Lavalle entre Cochabamba y Pellegrini y le realizaron un tiro para obligarlo a detener la marcha. Una vez que eso ocurrió, dos sospechosos se bajaron, rompieron una ventanilla del Onix y sustrajeron ocho millones de pesos que serían del supermercado Único de Lavalle al 2500 que administra la familia Roccuzzo.
El asalto duró cuestión de segundos, según adelantaron fuentes policiales a Rosario3. Los atacantes, de acuerdo a los primeros indicios, iban en un Focus o Cronos blanco.
Los dos ocupantes del Onix fueron asistidos por personal médico, ya que estaban en estado de shock.
“Pidieron un móvil de auxilio por un robo. Tienen escoriaciones leves y presión alta. Ahora viene una unidad de mayor complejidad para evaluarlos. Están bien”, dijo a Cada Día (El Tres) uno de los médicos que acudió al lugar.
Segundo ataque a la familia Roccuzzo
El de este miércoles no es el primer episodio de inseguridad que sufrió en 2023 la familia Rocuzzo, ya que el pasado 2 de marzo atacaron a tiros el supermercado Único que administra la familia en Lavalle al 2500, donde los sicarios además dejaron una nota dirigida a Messi y al intendente Pablo Javkin.
Tras efectuar al menos 14 disparos sobre el local comercial, el gatillero dejó el siguiente mensaje: “Messi te estamos esperando, Javkin también es narco, no te va a cuidar”.
La balacera, que generó una gran conmoción y tuvo trascendencia internacional por la vinculación con el futbolista rosarino, quedó registrada en cámaras de videovigilancia de la cuadra, donde fueron captados dos ocupantes de una moto que frenó frente al negocio. El que iba como acompañante se bajó del vehículo, dejó el pedazo de bolsa de carbón escrito y después abrió fuego.
Según expuso la Fiscalía en la investigación, fue uno de los ataques ordenados desde la celda de Pablo Nicolás Camino, el recluso díscolo de la banda de Los Monos. El objetivo, de acuerdo a lo explicado por la Justicia provincial fue perjudicar a sus ex socios Leandro “Pollo” Vinardi y Leandro “Toro” Escobar, gerentes de la barra brava de Newell’s con quienes mantuvo una agria disputa entre noviembre y marzo que incluyó asesinatos y ataques para generar conmoción pública en Rosario y la región.
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