El Ministerio de Economía de la Nación prepara una serie de medidas que serían anunciadas este viernes en el marco de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

De acuerdo a información difundida por medios porteños, entre los anuncios se podría reversionar un dólar diferencial para las exportaciones del agro en torno a los $350 aunque no inluiría a la soja. Asimismo, versiones indicaban también el cobro del Impuesto PAIS a las importaciones.

Este jueves una delegación del Palacio de Hacienda y los técnicos del Fondo Monetario continuaban trabajando en Washington para fortalecer el programa argentino con el objetivo de llegar a un acuerdo.

Un portavoz del FMI confirmó que continúan las reuniones presenciales con el objetivo de alcanzar un acuerdo y que las discusiones están enfocadas “en las políticas para fortalecer las reservas y mejorar la sostenibilidad fiscal”.

“Nuestros equipos continúan trabajando constructivamente, en persona, con el objetivo de llegar a un acuerdo sobre la quinta revisión del programa de Argentina respaldado por el Fondo. Las discusiones continúan enfocadas en las políticas para fortalecer las reservas y mejorar la sostenibilidad fiscal. Continuaremos comunicando sobre el progreso de estas discusiones”, señaló una fuente del organismo multilateral.

La precisión del portavoz del FMI se produjo luego de que el ministro de Economía, Sergio Massa, hablara con la titular del organismo, Kristalina Georgieva, lo que derivó en que se aceleren las negociaciones para intentar llegar a un acuerdo técnico.

Luego de la conversación entre ambos, que se habría prolongado por el lapso de una hora, se supo que Massa tomó la decisión de sumar al equipo negociador que se encuentra desde el martes último en Washington a Leonardo Madcur, el jefe de Asesores del Ministerio, y a Raúl Rigo, secretario de Hacienda.

Tanto el Gobierno como el FMI están trabajando para cerrar el acuerdo técnico sobre el fin de semana.

El funcionario argentino y precandidato presidencial por Unión por la Patria dialogó también con altas fuentes del gobierno de Estados Unidos, en momentos críticos donde se define la reformulación del programa, el eventual adelanto de desembolsos -se habla de alrededor de unos 8.500 millones de dólares-, y los repagos del programa vigente, que fue suscripto en 2022.

Si bien la idea inicial del gobierno era cerrar un acuerdo esta semana, no se descarta que las mismas se extiendan durante los próximos días, por lo que podrían tener un cierre a principios de la próxima semana.

En ese marco, el ministro Massa deberá decidir si viaja a Washington -e interrumpe su campaña- para terminar de cerrar el entendimiento con el organismo.

El FMI publicó el Informe del Sector Externo del año 2022, que fue revisado por el directorio del organismo la semana pasada.

En lo que respecta a la Argentina, el staff técnico del organismo multilateral advirtió que las políticas fiscales y monetarias son necesarias para asegurar los superávit comerciales proyectados y mejorar la cobertura de reservas.

En ese marco, dijeron que el país debe implementar una “política monetaria restrictiva y un régimen cambiario simplificado”.

“Dada la escasez de reservas, las ventas de divisas (en el mercado oficial o paralelo) deben ser consistentes con las metas de acumulación de reservas, teniendo en cuenta la variabilidad derivada de factores estacionales y episodios temporales de volatilidad excesiva”, agregó el organismo.

En lo que respecta a las negociaciones en curso, uno de los puntos que más interesa a la Argentina pasa por el adelantamiento de fondos de parte del organismo multilateral, de manera de fortalecer las reservas afectadas por el impacto de la sequía en las exportaciones del sector agropecuario.

El monto que el FMI adelantaría rondaría los 8.500 millones de dólares, según trascendidos.

Los fondos pendientes del programa que la Argentina mantiene con el FMI para la segunda mitad del año suman en total 10.400 millones de dólares aproximadamente.

La Argentina solicitó un adelanto parcial o total de los mismos, en medio del año electoral y por los efectos de la sequía, que significaron una pérdida para el país de alrededor de 20.000 millones de dólares.