El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) dio a conocer nuevos resultados provisionales del Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2022. En esta oportunidad el organismo que dirige Marco Lavagna publicó datos sobre las condiciones habitacionales de las viviendas particulares ocupadas, entre los cuales se destaca que sólo el 65,5% de los hogares disponen de vivienda propia en todo el país.
La tendencia es a la baja si se comparan estos datos con los obtenidos en el Censo 2010, el cual arrojó que en ese entonces el 72,95% de los encuestados tenía un régimen de tenencia de vivienda propia (68,69% había respondido en esa oportunidad ser propietario de la vivienda y el terreno y 4,26% de la vivienda solamente).
En un mercado inmobiliario local que funciona de manera cada vez más precaria y que convive con alquileres temporarios y dolarizados, si se desglosa la información por provincia se observa que en la Ciudad de Buenos Aires esa cifra es del 52,9%, en tanto que en la provincia de Buenos Aires asciende al 67,3%.
Un dato interesante al respecto es que Santiago del Estero es la provincia con mayor porcentaje de tenencia de vivienda propia con 83,7%, al igual que las provincias del NOA y NEA, que están por encima de la media nacional. Entre las jurisdicciones con menor porcentaje de viviendas propias se ubica la Ciudad de Buenos Aires con 52,9%, Tierra del Fuego, Antártida a Islas del Atlántico Sur con 55,9% y Santa Cruz con 57,8%.
Volviendo a los resultados del total por país, que arrojaron que el 65,5% de los hogares disponen de vivienda propia, el resto del porcentaje total de encuestados (un 35,5%) es inquilino, o bien habita una vivienda cedida por trabajo, prestada u optó por “otra” categoría”.
Con los datos ofrecidos por el relevamiento oficial la pregunta obligada (y repetida a nivel local) es el por qué de las dificultades en la accesibilidad a la vivienda. No hay una única respuesta sino que es el origen es multicausal, y debe buscarse en la falta de créditos y una inflación en alza que impacta en los valores de los inmuebles y que no va en línea con la suba de los salarios.
De acuerdo al último índice de Accesibilidad al Crédito Hipotecario de la Dirección de Estadísticas y Censo de la Ciudad de Buenos Aires “el ingreso de una pareja aspirante representó poco más de un tercio del mínimo necesario para acceder a un crédito hipotecario en la Ciudad de Buenos Aires. Así, una pareja de calificación ocupacional alta debería casi triplicar sus ingresos para poder calificar a un préstamo para la compra de un departamento de 2 ambientes”.
Los datos corresponden al tercer trimestre de 2002 y estipulan que “la cuota inicial del crédito representó el 80,5 % del ingreso promedio, muy alejado de la restricción general que impone el mercado crediticio –30%–”. Pero además agregan que, “si, a modo de referencia, se vincula con el valor del alquiler de una vivienda similar, el precio promedio de publicación significó la cuarta parte del valor de la cuota”.
Condiciones habitacionales: otros indicadores
Otros datos interesantes que arrojó el Censo 2022 es, en términos de Saneamiento, que el 94,5% de las viviendas particulares ocupadas de todo el país tienen baño o letrina dentro de la vivienda. En tanto, tan sólo el 24,9% tiene uno más baños. En la misma línea el 90,9% el baño tiene inodoro a botón, mochila o cadena (arrastre de agua).
En lo que respecta al eje Gas de red y electricidad, representan el 58,4% de las viviendas particulares ocupadas en las que los hogares utilizan principalmente gas de red electricidad para cocinar.
Respecto al apartado Agua, el 92,3% tienen agua por cañería dentro de la vivienda, y en el 85,4% el agua para beber y cocinar que usan los hogares proviene de la red pública.
Respecto a las Tecnologías de la información y comunicación, en el 78% de las viviendas particulares ocupadas hay conexión a internet. En tanto, en el 89,7% poseen celular con internet, mientras que el 59,3% tienen dispositivos como computadora o tablet.