La llamada ley de Bases y Puntos de Partida, en su nueva versión, comenzó a ser debatida este lunes en la Cámara de Diputados de la Nación, luego del dictamen obtenido la semana pasada.

El oficialismo confía con la media sanción luego de negociar el proyecto en su totalidad con los bloques dialoguistas durante más de un mes, tras el estrepitoso fracaso de febrero, y a menos de un mes de la convocatoria al Pacto del 25 de Mayo, motorizado por el presidente Javier Milei.

El inicio de sesión no estuvo exento de debate. El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, sometió a votación el plan de Labor Parlamentaria, que resultó aprobado con 140 votos afirmativos, 109 negativos y 0 abstenciones.

De esta manera, la ley de Bases y el paquete fiscal se tratarán de forma conjunta y su votación será por separado, según detalló el sitio Parlamentario.

En tanto, la votación en particular se hará por capítulos, aunque diputados de los bloques dialoguistas reclamaron que algunos artículos se voten de manera diferenciada. Además, Menem agregó que la lista de oradores se cierre a las 15, lo que despertó las quejas de la oposición más dura.

De acuerdo al cronograma, está previsto que el debate no llevará menos de 30 horas, lo que significa que se podría estar votando el martes por la tarde. Aunque algunos legisladores señalaron también que la votación en general podría desarrollarse en la madrugada del miércoles.

El presidente Javier Milei siguió el inicio de la sesión de Diputados desde la Quinta de Olivos.

 

 

 


 

 

El gobierno confía en la aprobación del proyecto de ley Bases ya que arribó a un consenso mayoritario recién el miércoles pasado después de extensas rondas de negociaciones que se desarrollaron entre la Casa Rosada y el Congreso de la Nación. Eso destrabó el tira y afloje y permitió que, el jueves pasado, se realizara el plenario de comisiones en el que lograron plasmar en un dictamen de mayoría.

La Libertad Avanza intentó en reiteradas oportunidades abarcar varios ejes reformistas, pero algunos tópicos que impulsaban determinados bloques eran rechazados por otros y viceversa. La versión final no terminó de conformar a nadie a excepción de La Libertad Avanza, naturalmente, y del PRO.

Pese a esto, su votación en general estaría garantizada con un piso de 135 votos a favor, según fuentes parlamentarias del oficialismo. También remarcaron que difícilmente puedan perforar los 150 votos, que sería el techo.

En el pelotón de apoyos aparecen los 38 votos de La Libertad Avanza, dos de Buenos Aires Libre, tres del MID, tres de Independencia, 37 del PRO, al menos 17 de los 22 de Hacemos Coalición Federal, al menos 29 de los 35 radicales, los ocho de Innovación Federal y uno de Creo.

La parte más difusa y empinada vendrá después, en la votación en particular, ya que hay artículos que penden de un hilo y podrían caerse si el oficialismo no ajusta las clavijas hasta el último momento. Pese a renegar de la política, la fuerza del Gobierno deberá maniobrar con astucia y pericia hasta el final para que no se le escabulla ningún voto.

 

Paquete fiscal

El gobierno avanzó también con el dictamen del paquete fiscal que incluye el regreso del impuesto a las Ganancias, cambios en Bienos Personales, un blanqueo de capitales y una moratoria impositiva.

Respecto a Ganancias, el proyecto reinstala este tributo para la cuarta categoría para aquellos salarios superiores al $1.8 millones de pesos para los trabajadores solteros y 2,2 millones para los trabajadores casados con dos hijos.

El dictamen salió con 27 firmas y 7 disidencias.