En medio de una fuerte interna entre el ex presidente Mauricio Macri y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, este jueves se celebró la Asamblea partidaria del PRO en la que finalmente -y como se anticipaba- fue designado al frente el diputado nacional Martín Yeza, en lugar de Bullrich. Y ahora, en pleno hervidero político, el PRO le marcó la cancha al propio presidente Javier Milei. De fondo, está la discusión sobre una posible fusión entre el partido de Macri y La Libertad Avanza (LLA), cosa que el primero resiste y la ministra da por hecha.
“Éste es un gobierno con minoría institucional y si nosotros tomáramos una actitud de mirarnos un poquito más a nosotros y menos al Gobierno para ver cómo ayudar de una manera sana, es cierto que se podría poner peligrosa la Argentina”, dijo Yeza en contacto con radio Rivadavia.
El quiebre interno del PRO, que arrastra conflictos desde que Bullrich perdió la elección general y consiguió desembarcar casi sola en el nuevo gobierno libertario, se hizo evidente este jueves cuando Yeza tomó las riendas del órgano encargado de definir las alianzas del partido, justo cuando se pone en cuestión si conviene o no profundizar la alianza con LLA.
Ya el lunes, con la firma del propio Macri, el PRO había difundido un duro informe con críticas al rumbo de la gestión y planteó que “hay más interrogantes que certezas”. Y luego el ex presidente amplificó en redes sociales su reclamo por los fondos coparticipables a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba).
Este viernes, Yeza también planteó diferencias en términos de política exterior: “Vamos viendo lo que pasa en materia de relaciones internacionales; un día nos peleamos con España, otro día decimos que Bolivia se hizo un autogolpe, que los chinos tal cosa, y es algo con lo que no estamos de acuerdo”.
Y hasta pareció criticar una suerte de falta de iniciativa política al preguntarse por qué el Gobierno todavía no usaba las herramientas que le concedió recientemente el Congreso.