Tras las protestas de este miércoles, el gremio ATE confluyó en un plenario de delegados que determinó convocar a un paro nacional de trabajadores estatales para este viernes. A la medida de fuerza se sumó el anuncio de una marcha, a las 13 de ese día, hacia el Ministerio de Economía.
“Le vamos a dar pelea y le vamos a sacar la motosierra”, aseguró el titular de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, y resaltó que “este fin de semana se recibieron miles y miles de telegramas de despidos, en todos los casos ilegales y arbitrarios”.
En declaraciones radiales, el rionegrino remarcó que las ocupaciones pacíficas en ministerios y organismos públicos de la jornada se dieron “a pesar de que el Gobierno decidió llenar de policías todas las dependencias públicas”.
En esa línea, Aguiar había afirmado que el Gobierno va “por la cabeza de los 70 mil contratados”. Y sumó: “Por eso, a la tarde en un plenario de más de mil delegados vamos a definir la profundizar el plan de acción y vamos a proponer una nueva medida de fuerza general antes de que termine esta semana”.
Al justificar el ingreso de los cesanteados a sus lugares de trabajo, Aguiar afirmó que “la comunicación del despido resulta absolutamente ineficiente en términos jurídicos” y destacó que el empleo público cuenta con altos índices de precarización.
“Esto es responsabilidad absoluta de todas las gestiones que se sucedieron por la Casa Rosada y no le dieron solución a este fraude laboral de 70 mil trabajadores que deberían estar en planta permanente: acá no hay ñoquis y el pueblo empieza a darse cuenta”, sumó Aguiar.
Para finalizar, Aguiar sostuvo: “El ñoqui más caro que tiene el Estado es alguien asumió el 10 de diciembre y se pasa el 80% de su jornada laboral jugando en las redes sociales”.